La discapacidad auditiva es común en todo el mundo y se estima que el 50% de toda la sordera y la discapacidad auditiva se pueden prevenir.

Aunque no sean fatales, las implicaciones de la discapacidad auditiva a nivel individual, familiar y social, y la interrupción que causa en la vida de las personas son considerables.

Las implicaciones de largo alcance de la pérdida auditiva, tanto en lo que respecta al desarrollo de las habilidades de comunicación como a las consecuencias sociales y económicas y la calidad de vida, exigen una necesidad urgente de resaltar la magnitud y la gravedad del problema.

Como esta discapacidad “no se puede ver”, las personas que la padecen, muchas veces no lo manifiestan abiertamente y retrasan el tratamiento, lo que puede conllevar a un padecimiento mayor, evitando así una posible solución que cuanto antes se aplique, más efectiva será.

Hasta la mitad de los casos de pérdida de audición y sordera se pueden prevenir con los métodos adecuados.

Siempre que se detecte en forma temprana y se maneje adecuadamente a través de la educación para la salud, la pérdida auditiva puede tener solución. En muchos países hay programas de desarrollo enfocados a prevenir la sordera y, aunque quizá no están tan implantados como los de la ceguera, cada vez más se dan a conocer tratamientos para todas las edades, desde la infancia hasta las personas de la tercera edad.

Enfermedades del oído que pueden llevar a la pérdida auditiva

Una variedad de enfermedades del oído puede conducir a la pérdida auditiva tanto conductiva como neurosensorial. La prevalencia de enfermedades del oído se detalla aquí.

Aquí podemos ver algunas patologías del oído que, generalmente, tienen el potencial de conducir a una discapacidad auditiva:

  • Cerumen compactado: el cerumen en el oído, comúnmente denominado cera en el oído, está presente en un gran porcentaje de personas. La compactación del cerumen a menudo conduce a una pérdida auditiva que puede ser leve o moderada. Esta es una forma de pérdida auditiva que es completamente evitable y tratable. Además de la pérdida de audición, el cerumen compactado puede conducir a otras enfermedades del oído como la otitis externa.
  • Otitis media supurativa crónica (CSOM, por sus siglas en inglés): es de dos tipos, tubotimpánica y atticoantral. El CSOM puede ocurrir en todas las edades, pero los niños a menudo son los más afectados. Puede llevar de moderados a severos grados de discapacidad auditiva. Esta entidad se puede prevenir en un gran número de casos siguiendo ciertas precauciones simples. Donde quiera que ocurra, puede tratarse para corregir la pérdida auditiva y prevenir complicaciones.
  • Otitis media no supurativa crónica: la otitis media no supurativa se produce como resultado de infecciones del oído medio tratadas incorrectamente e infecciones respiratorias superiores. Se puede prevenir y tratar en gran medida por medios médicos y quirúrgicos. Sin tratamiento, conduce a la pérdida de audición y puede progresar para causar otitis media supurativa crónica.
  • Otosclerosis: La otosclerosis suele ser hereditaria y afecta a los huesos del oído medio (martillo, yunque y estribo), una parte del estribo crece anormalmente y perturba la mecánica normal de la audición en respuesta a las ondas sonoras. Afecta a frecuencias bajas antes que frecuencias altas, por ello las personas con otosclerosis a veces oyen mejor en entornos ruidosos. Si no se trata, puede empeorar progresivamente hacia la sordera total.
  • Otras causas de pérdida auditiva: infecciones virales, impactación de un cuerpo extraño, consumo de medicamentos, tumores, timpanosclerosis, etc. Todas las afecciones pueden tratarse para prevenir y corregir la pérdida auditiva resultante.

Revisión y tratamientos para la pérdida auditiva

¿Problemas de audición? ¿Notas que cada vez que te hablan tienes que pedir a la gente que repitan lo que han dicho? ¿Subes la televisión cada vez más para enterarte de lo que dicen? ¿Percibes el sonido de forma confusa y con mucho ruido ambiente?

Periódicamente es conveniente realizarse una prueba de audición, sobre todo a partir de los 60 años o si ha tenido exposiciones continuas al ruido. Mediante esta prueba podrá descubrir si existe la posibilidad de que tenga problemas auditivos.

Las pruebas auditivas son rápidas e indoloras y con ellas se pueden detectar posibles deficiencias y ponerle remedio a tiempo.

En Farmacia Fatou llevamos muchos años al lado de nuestros clientes y sabemos que estas afecciones ocurren a menudo, por eso ofrecemos servicios especializados en audición de forma cercana y especializada.  

Realizamos pruebas audiométricas a mayores de 10 años en adelante, con el objetivo de obtener datos certeros y poder aconsejar la manera más eficiente de corregir estos problemas.

En caso de necesitar algún tratamiento contamos con diversas opciones como: la adaptación de audífonos, prótesis, moldes auditivos, ayudas técnicas, etc.

Consulta con nuestros profesionales, ven a revisión y te realizaremos las pruebas audiométricas adaptadas para determinar tu grado de audición.

¡Consulta nuestras promociones!